Según el estudio “De la Teoría a la Acción”, realizado recientemente por Oracle, solo el 34% de los empleados no directivos en MÉXICO asegura sentirse orgulloso de trabajar para su organización. De aquí extraemos la inquietante conclusión de que la mayoría de ellos está descontento, o como mínimo poco comprometido con su empresa. Lejos de tratarse de un dato anecdótico, resulta bastante preocupante en realidad. Está claro que la cultura empresarial de las compañías en Latinoamerica no está suficientemente adaptada a las necesidades y expectativas de los empleados no directivos. Y no sólo hablamos de sueldos: igualmente alarmante es el hecho de que solo el 19% siente que su empleador se preocupa sobre su bienestar general, y sólo el 28% percibe a sus jefes como alguien visible y cercano. Además, muchos de estos empleados no parecen tener buenas perspectivas o esperanzas sobre su futuro en la empresa actual.
Y es que los trabajadores de hoy quieren sentir que juegan un papel importante en el éxito de su compañía. Y esto a su vez puede reportar un interesante beneficio para ésta, ya que el pensamiento innovador se da en cada uno de los escalones de la jerarquía salarial, y se corre el riesgo de perder valiosas contribuciones si no les permite a todo el personal, desde el nivel más alto al más bajo, mostrar su talento.
El sentido de orgullo y de pertenencia. Un trabajador que se siente parte de una compañía y que además lo presume, no dudará en involucrarse para que “desde su trinchera”, se siga trabajando en tiempo y forma para alcanzar las metas de la organización.
Para lograr que los colaboradores se sientan orgullos de trabajar en nuestra empresa, debemos impulsar el respeto, la camaradería y la imparcialidad.
Sobre este último elemento, la imparcialidad, es importante que logremos un trato equitativo y justo entre el talento que ya estaba en la compañía al momento de la fusión o la adquisición y entre los empleados que se sumarán al equipo. Si desde los altos niveles jerárquicos empezamos a marcar diferencias en trato, responsabilidades e incentivos será muy complicado que en la base de la organización se logre una fusión entre los empleados y conformemos equipos sólidos capaces de generar resultados.